Inés Efron nació en México, donde sus padres se refugiaron durante la dictadura militar de Argentina.
Regresaron al país cuando ella tenía 4 meses. Vive en San Martín, en Argentina, junto a sus padres, y es pariente lejana de Paloma Efron.
Comenzó a los 14 a estudiar teatro y se perfeccionó en el taller de Nora Moseinco, donde estudió hasta los 20.
A los 19 debutó en teatro en una obra de Lola Arias "Poses para dormir", donde aparentemente comenzó a configurar su éxito y a consagrarse en papeles complejos. Allí hacía de Tao, una soldado de un país post nuclear. Posteriormente, actuó en la obra "La luz interior", nuevamente bajo la dirección de Arias.
En cine logró cierto reconocimiento a partir de su actuación en "Cara de queso" (2006), y ese mismo año protagonizó "Glue" (Historias adolescentes en medio de la nada), película ganadora del Festival del BACIFI 2006.
El gran salto lo logró luego de su excelente actuación en
XXY (2007), film de Lucía Puenzo que analiza la problemática sexual de una adolescente de 15 años, hermafrodita, indecisa sexualmente y que pone al revés el mundo de sus padres, encarnados por Ricardo Darín y Valeria Bertucelli.