La película Kinsey: El científico del sexo fue dirigida por Bill Condon
En 1948, Kinsey cambió de manera irrevocable la cultura norteamericana con su libro "El Comportamiento Sexual en el Macho Humano". Al entrevistar a miles de personas acerca de los aspectos más íntimos de sus vidas, Kinsey liberó del peso del secreto y la pena a una sociedad para la cual sus prácticas sexuales eran cosa mayormente desconocida. Su trabajo dio inicio a uno de los debates culturales más intensos del pasado siglo. La prensa equiparó su impacto con aquel de la bomba atómica. Pero mientras el país entró en la Guerra Fría en la década de 1950 el subsiguiente estudio de Kinsey relativo a las Hembras, es visto como un ataque dirigido a los más básicos valores norteamericanos. El escándalo subsecuente y la ira pública, provocó que los benefactores de Kinsey lo abandonasen, justo en el momento en que empieza a deteriorarse su salud. Muere en 1956, con el miedo que el trabajo de su vida haya sido un fracaso. Es sólo a través del contacto con uno de los últimos sujetos a los que entrevistó, cuando logra atisbar los efectos positivos que tuvo su trabajo y empieza a entender que la pregunta básica relativa al punto en que termina el sexo y se inicia el amor, es algo que nunca podrá ser completamente explicado por la ciencia.